domingo, 30 de septiembre de 2007

En estado de quiebra




Depresiva, ignorante, sangrante y doliente
Que otros adjetivos puedo utilizar al fin y al cabo todo depende del estado climático las etapa de la luna la época del año y la zona horaria
Al diablo a quien trato de engañar me siento completamente destrozada, sola y triste
En este minuto el sonido de las teclas es la mejor composición que puedo realizar
Ni líneas circulares ni concéntricas ni tampoco cuadriculares o que se yo
Por más que eso me desahogue ni siquiera eso puedo coordinar
Me siento sumergida en un inmenso vació, harta de todo esta parafernalia de caretas y máscaras
Desfile de la más alegre y más maquillada, para aparecer en la pasarela de la vida como si nada ocurriese
Lloras y corren para sobarte las espaldas para hacerte sentir aun más miserable por tu desgracia
Solo pides un poco de silencio, respetable, en estas ocasiones
En la que la llave de salida la perdiste, entre tantas vueltas que diste por buscarla

Lo asumo, soy más frágil que cualquiera, más vulnerable de lo que aparento y más sensible de lo que imito…
Y aún más no puedo odiar, soy incapaz de sentir tal emoción más de 5 minutos a la semana
No quiero intentar mas llenar mis espacios vacíos ni llorar lo que no tuve la posibilidad de tener
No quiero más nada
Solo que esta tremenda sensación de desnudez frente al mundo desapareciese
Es como si fuera a aprender a caminar de nuevo
Por que las cicatrices que me dejaron, finalmente me impiden partir con el paso que deje antes de que todo esto ocurriese
Siento como si hubiese perdido la luz
Como si este aprender a caminar además de que sea con pasos nuevos lo hiciese, a oscuras y tan miope como todos me conocen
Creo que el encontrar alguna brújula o ancla me ayudaría, pero ni eso tengo
La ubicación temporo-espacial en este minuto es aún más difícil de describir
A tientas logro asirme a lo primero que encuentro que generalmente son intentos sublimes de salvación inventados por mi
Que se desvanecen apenas los toco
Y de bruces…de nuevo al suelo
El suelo cuan resistente puede ser, cada día me doy cuenta que me ha soportado 25 años de caídas, físicas y emocionales, absorbiendo mis lágrimas, mi sudor y mi sangre
Para que finalmente se alimente de mi carne
Es la única compañera fiel que sostiene tus pasos sin opinar cuan rápido o fuerte la golpean
Cuan lenta o circulares son tus rutas
Lo único que realmente tengo, son un par de pasos sostenidos en el tiempo